Tormenta de neurotransmisores en el amor
¿Qué mecanismos están conectados en los cerebros de Igtá y Picazú?
En un Instituto de Investigación en Ohio, Estados Unidos, estudian el "amor sin límites", lo llaman "Neurobiología del Amor" e identificaron qué mecanismos están conectados en el cerebro para que se produzca "amor sin límites".
Según Facundo Manes, cuando se hacían estudios con resonancia magnética funcional, a un grupo de personas estudiadas, se podía notar que se activaban las áreas que pertenecen al sistema de recompensa cerebral, cuando hablaban de la persona amada o miraban sus fotos. Estas zonas contienen una alta densidad de receptores para las hormonas oxitocina y vasopresina.
¿Por qué el amor es ciego?
Porque se desactivan los circuitos cerebrales responsables de las emociones negativas y de la evaluación social.
O sea cuando amamos a alguien, sólo vemos los aspectos positivos, nunca vemos sus defectos, estamos hipnotizados, producto de la hormonas del amor, efecto que dura algunas semanas.
Según Diego Golombek, biólogo, autor de "Sexo, drogas y biología", el cerebro enamorado no solo vive de las neuronas, sino de las sustancias que las comunican, que se llaman neurotransmisores y las hormonas que la regulan.
Cuando decimos que sentimos mariposas en el estómago, es porque nuestro cuerpo está atravesando una tormenta de neurotransmisores, dopamina y serotonina.
Los neurotransmisores responsables del amor de Igtá y Picazú son la dopamina y la serotonina, las hormonas son la vasopresina y la oxitocina, que a su vez influyen en la fidelidad y en el interés por el ser amado, cuando ambos escapan de los indios de su tribu.
EL amor de Igtá y Picazú, tenía un componente psicológico y otro fisiológico.
Desde lo fisiológico, que tiene en común Igtá y Picazú, Romeo y Julieta, Brad Pitt y Angelina Jolie, es simple, la dopamina y serotonina, que ejercen hipervínculos en las neuronas y las que hacen clic en ellas son las hormonas oxitocina y vasopresina.
¿Por qué el amor es ciego?
Porque se desactivan los circuitos cerebrales responsables de las emociones negativas y de la evaluación social.
O sea cuando amamos a alguien, sólo vemos los aspectos positivos, nunca vemos sus defectos, estamos hipnotizados, producto de la hormonas del amor, efecto que dura algunas semanas.
Según Diego Golombek, biólogo, autor de "Sexo, drogas y biología", el cerebro enamorado no solo vive de las neuronas, sino de las sustancias que las comunican, que se llaman neurotransmisores y las hormonas que la regulan.
Cuando decimos que sentimos mariposas en el estómago, es porque nuestro cuerpo está atravesando una tormenta de neurotransmisores, dopamina y serotonina.
Los neurotransmisores responsables del amor de Igtá y Picazú son la dopamina y la serotonina, las hormonas son la vasopresina y la oxitocina, que a su vez influyen en la fidelidad y en el interés por el ser amado, cuando ambos escapan de los indios de su tribu.
EL amor de Igtá y Picazú, tenía un componente psicológico y otro fisiológico.
Desde lo fisiológico, que tiene en común Igtá y Picazú, Romeo y Julieta, Brad Pitt y Angelina Jolie, es simple, la dopamina y serotonina, que ejercen hipervínculos en las neuronas y las que hacen clic en ellas son las hormonas oxitocina y vasopresina.
Según Jorge Luis Borges, "Uno está enamorado cuando se da cuenta de que la otra persona es única".
Según los científicos, "Uno está enamorado cuando atravesamos una tormenta de serotonina y dopamina"
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